Hacía tiempo que se venía hablando de la traducción de una obra de Nnedi Okorafor y por fin la podemos disfrutar en castellano gracias a la traducción de Carla Bataller Estruch. La forma que mejor se me ocurre de describir esta novela Editada por Crononauta es comparándola con una gran explosión de emociones. Su frescura y humanidad están patentes desde el primer momento. No sería del todo fiel decir solamente que se trata de una novela en la que se dejan patentes las problemáticas de los prejuicios raciales y culturales, que también, pero dejaríamos fuera la fragilidad y fortaleza que posee nuestra protagonista, así como el anhelo y la pasión por el conocimiento que salpican toda la obra. Personalmente me fascina esa, podría llamarla, “espiritualidad matemática” de la que hace gala nuestra joven protagonista. Para no extenderme más, os recomiendo que la disfrutéis, la saboreéis porque a pesar de ser corta Binti alberga una inmensidad entre sus páginas.